• La mecánica del amor {8}

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Y te das cuenta que todo pasa rápido, que quizá lo que pasa es lo que menos esperas o tal vez es lo más esperado. También ocurre que te pasa con la persona menos esperada pero normalmente es con la menos indicada. Y tienes ganas de •______-(_______)

Y te das cuenta que todo pasa rápido, que quizá lo que pasa es lo que menos esperas o tal vez es lo más esperado. También ocurre que te pasa con la persona menos esperada pero normalmente es con la menos indicada. Y tienes ganas de mandarlo todo a la mierda, de encerrarte en una habitación oscura y no salir. Tienes la sensación de que todo te sale jodidamente mal. Pero te levantas, y pones una sonrisa de 'todomedaigual' y perfecto, sí, perfecto para la gente que te ve, pero no para ti. Por eso se dice que ' las apariencias engañan'.

Después de regresar del centro de mamá, llego a mi casa. Intento comer algo, pero realmente no tengo ganas así que decido no comer. Cojo mi móvil, me tumbo en el sofá y entro en twitter. Y decido escribir algo.

• ' Otro día más. Otra lucha más. Otra sonrisa perdida. '

Me meto en su perfil. Quizá es una costumbre o es un seguramente a puesto algo. Y no me equivoco.

• ' Ya no más. Estoy decidido. Voy a vivir mi vida, a mi manera '.- hace dos minutos.

Suspiro. Doy a atrás y me desahogo entre palabras.

• ' Todo parece fácil cuando ves a una persona sonreír, pero no sabes todo lo que esa persona lleva metido en su corazón'

• ' No quieras comprender a quien nadie se ha interesado por comprenderte a tí '.

• ' No puedo pasar página de un libro que ha marcado tanto en mí.'

• ' Y de pronto veo su sonrisa y lo olvido todo. '

Y decido ser demasiado directa.

• ' Tu has decidido cambiar, y yo no quiero a el chico de ahora, quiero al chico de hace dos meses, el que me hacía sonreír cada mañana. '

Le doy a 'tweet' , y tiro mi móvil hacia el otro sofá. '17:39h' pienso después de mirar mi reloj. Me levanto, y meto en la mochila algunas cosas necesarias para hacer el trabajo de química. Mi móvil suena, y mi corazón empieza a latir por algún motivo del que no tengo ni ídea. Me acerco al sofá y cojo el móvil. Un mensaje de Justin. Hago una mueca.

• No voy a por ti, ven andando.

Decido contestar.

• No tengo ni idea de donde queda tu casa, te lo dije.

Enviar. 1 minuto después me llega otro. Lo abro.

• Siempre dando ruído. Pues paso de recogerte.

Me entran ganas de estampar el móvilcontra la pared, pero decido controlarme.

• Me importa una mierda si pasas o no. Me recoges y punto, no quiero suspender química porque a tí te salga de los huevos.

Envío. ¿Pero qué se crée este niño? Si quiera pasa un minuto, y ya recibo la respuesta.

• Te tranquilizas. Y paso de recogerte, haz el trabajo sola.

Gilipollas. Decido no contestar, tiro el móvil al sofá y me dispongo a empezar a hacer el trabajo. Apunto en un papel los materiales que necesito para hacer una fuente. Cojo el móvil, y dinero. Salgo de casa y cierro detrás de mi. Voy hacia la ferretería que hay en la otra calle, compro todo lo necesario, pago y con una sonrisa me despido. Vuelvo a casa. Y empiezo a hacer el trabajo. De pronto suena la puerta. Me exarto. Dejo el pegamento ha un lado, y voy hacía la puerta pegando pequeños saltos. Abro.

- ¿Qué haces aquí, Justin? Si me acabas de decir que no vendrías.-digo mientras le miro con una ceja levantada.

- Venga vamonos.

- Ehhhhhhhhhhhhhhhhhh.-digo levantando mi mano en signo de 'para'.- Tranquilizate nene. Estába muy bien haciendo el trabajo sola.

- _____ te lo dije esta mañana, voy a hacer contigo el trabajo y luego como si nada.

- ¿Qué me estás contando? si eres tú el que se hace el chulo por mensajitos y ahora apareces aquí.

- Bueno pues nada, me voy.- se gira. Gruño por lo bajo y el se da la vuelta.

- Espera voy a coger las cosas.-me giro para entrar, pero me detengo, giro nuevamente hacia él.- puedes entrar eh.

Y voy hacia la mesa donde están todas las cosas, escucho el ruido de la puerta cerrar, me giro un poco y ahí está él con una sonrisa que se esfuma al notar que le estoy mirando. Meto las cosas en una mochila.

•_____________-JUSTIN.

Va hacía el sofá y empieza a buscar su móvil. Miro su trasero cuando se inclina un poco hacía delante. Trago saliba y muerdo mi labio. Sacudo un poco mi cabeza para dejar de pensar en cosas que pueden traer consecuencias. Se gira hacía mi. Suspira. Mira hacía el lado y una sonrisa se forma en sus labios, exacto no encontraba su móvil y lo acaba de ver. Lo coje. Río por lo bajo. Ella me mira desafiante. Se cuelga la mochila en su pequeña espalda, mete su móvil en el bolsillo delantero de su pantalón, se echa el pelo hacia atrás, y me mira.

- Ya podemos irnos.

Y tras decir esto pasa por mi lado dejandome un perfecto olor a su perfume. Inspiro, sonrío. Me giro, y salgo de su casa detrás de ella. Cierra la puerta, y yo mientras me acerco a mi moto. Cojo mi casco y se lo doy.

- ¿Y tú no usas casco? -pregunta mientras se lo pone. Niego con la cabeza y me monto en la moto. Ella dice algo por lo bajo que no logro escuchar, pone sus manos en mis hombros, coje impulso y se sube detrás de mi.

Arranco, y ella rodea mi torso con sus brazos. Arranco de nuevo, ella aprieta más. Río, y arranco para poder vagabundear sobre las calles de Cánada. Noto el viento fuerte dandome de cara, nunca habrá una puta sensación mejor que esta. Adredalina. Acelero. Ella aprieta mucho más fuerte, y se abraza a mi. Pegando su pecho con mi espalda. Sintiendo su corazón latir muy rápido. Y me hace pensar en todo. No pienses Justin, no. Pero es que no he dejado de pensar ni un jodido día en su sonrisa. En sus ojos. En su cara. En la forma que tiene de andar. En su voz. En ella entera. Quizás estando así me hago daño a mi mismo e incluso nos podemos hacer daño los dos, pero no quiero sentir eso a lo que llaman amor. No. Estoy decidido a olvidarme de todo. A vivir sin preocupaciones. Cojo hacía la derecha, recto, izquierda. Y voy disminuyendo la velocidad hasta parar frente a mi casa. Ella se suelta rápidamente, y baja de la moto. Pongo la seguridad, y me bajo yo. Se quita el casco y me lo da. Entramos dentro de mi casa, y un gran olor ha chocolate hace que mis tripas gruñan. Miro a _____ que se queda mirando la casa. Y siento la risa de mis princesas.

- Tatoooooooooooooooooooooo.-dice Jazzy mientras viene corriendo hacía mi. La cojo en brazos, su cara está llena de chocolate. Río.

- ¿Qué te ha pasado en la cara, enana? -pregunto mientras paso mi dedo indice por su nariz. Ríe, y mira hacía ____ que le dedica una sonrisa. Se baja de mis brazos y va hacía ella.

- Holaa ____- dice mi hermana con una sonrisa.

- Hola bonita.-sonríe ____.

- ¡Jazzy, ya casi está el chocolate! - grita mamá. Jazzy coje de la mano de ____ y estira de ella hasta entrar en la cocina. Y yo me quedo aquí. Totalmente plasmado mirando a la nada. Salgo de mi mundo y entro la cocina.

- ¡Que rico! -exclama ____ riendose.

- Lo hice yo.-dice mi hermanita orgullosa mientras toma un poco de chocolate. Mi madre carraspea y ríe junto a _____ y Jazzy.

- Ven, hijo, prueba el chocolate está muy bueno.-díce con una sonrisa mi madre mientras me enseña el tarro de chocolate líquido. Paso mi lengua por mis labios. Me acerco y tomo un poco.

- Mmm, me encanta.-digo mientras intento no perder el sabor.- Mamá ____ y yo vamos a estar en mi cuarto haciendo un trabajo de química, ¿vale? -mi madre asiente.- Vamos arriva ____.

Ella se despide de mi madre y mi hermana, y junto a mi sube arriba hasta entrar en mi cuarto. La miro, que difícil va a ser hacer un trabajo con ella sin que me regale una sola sonrisa.

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Miro su habitación. Una guitarra está dejada de caer en la mesa. Un gran poster de un ratón ocupa un pequeño trozo de pared. Fotos, fotos y más fotos. Un diploma enmarcado en frente del almario, y una cama realmente grande.

- Bonita guitarra.-decido opinar para romper el hielo.

- Me la regaló mi padre cuando cumplí cinco años.-dice mientras la mira.

- Yo tengo una.

- ¿Sabes tocar la guitarra, ___?

- Algo.

Y nuevamente el silencio se apodera de toda la habitación. Saco los materiales de la mochila y los pongo encíma de la mesa. El se acerca, y sin hablar empezamos a hacer el trabajo.

• 1 hora después.

- Eso no es ahí, Justin.-río mientras veo como quiere juntar dos piezas totalmente distintas.

- Que sí, verás.-ríe mientras lo intenta nuevamente. Crash. Se rompe. Y río fuertemente, el me acompaña en la risa. Y lo que hace poco era silencio, ahora se acaba de convertir en risas.

- Eres estúpido.-digo mientras río fuertemente. Me mira mientras sonríe. Y voy calmando mi risa hasta quedarnos mirandonos. Se gira mejor para quedar frente a mí.

- Y tú realmente preciosa.

• NARRADOR.

Y tú empiezas a sentir nuevamente esas sensaciones que remueven tu tripa, según lo que dicen algunas personas se llaman 'mariposas', pero nosotras llamemoslo de un nombre más realista, ¿Qué tal si le llamamos 'mágia' ?

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Noto como la sangre se acumula en mis mejillas, un gran calor pasa por todo mi cuerpo. No sé que decir, ni que hacer. Justin me mira ahora un poco más serio, sonríe poco a poco mientras hace un gran recorrido por mis labios. Me estoy poniendo nerviosa. Se está acercando, 'parate', se acerca más, 'para, por favor' y ahora puedo sentir como su respiración y la mía se mezclan. Puedo sentir como sus latidos y mis latidos hacen algo parecido a una canción. Una preciosa canción. Levanta su mano y la pasa por mi mejilla acariciandola dulcemente. Algo parecido a una media sonrisa atrapa mis labios, y Justin ahora mismo está atrapando mi corazón.

• NARRADOR.

Y esas cosas que no deberías de sentir, las sientes. Y todo eso que pensabas que no existía te das cuenta de que existen, y están dentro de ti. No sabes si gritar o callar. Si llorar o reír. Si sonreír o guardarlo todo en tu corazón. Te dan ganas de quererlo saber todo sobre eso que sientes, y que te impresiona a la vez, pero una mitad de ti no quiere saberlo, quiere que poco a poco tu corazón descubra todos esos sentimientos. Quiere que te encarges tú de tu destino. Por qué tú eres el destino, tu decides cada paso de tu vida. Está en tus manos ir hacia atrás o hacía delante. Está en tus manos enamorarte o no experimentar esa sensación. Está en tus manos recordar las cosas buenas o las cosas malas. Está en tus manos seguir la mecánica de tu corazón. Pero tu misma piensas, y esa pregunta que todo el mundo se ha pregunta para sí mismo empieza a dar vueltas en tu cabeza. '¿Y por qué no arriesgar? '